Así como los humanos usan sus manos para explorar e interactuar con el mundo que los rodea, los perros usan la boca para hacer lo mismo.
Al igual que ladrar y cavar, masticar es un comportamiento natural en los perros, pero puede plantear un problema cuando es destructivo. El comportamiento de masticación excesiva de un perro puede ser causado por problemas médicos o ansiedad por separación. Cuando esto ocurre, es posible que sea necesario consultar a un veterinario o especialista en comportamiento canino.
Si a su perro le gusta masticar, asegúrese de que tenga acceso a una amplia gama de juguetes para masticar interesantes y sabrosos. Evite que su perro mastique alambres, cuerdas, papeles o cualquier otra cosa que pueda haber estado usando como una salida de masticación inapropiada.
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Sin embargo, es posible que aún descubra que su perro está aburrido o no hace suficiente ejercicio si sigue masticando las cosas incorrectas.
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